Preferencias aplicadas

Cómo modificar un contrato de alquiler

Qué cambios se pueden hacer en un contrato de arrendamiento y cómo formalizarlos legalmente.
Modificar contrato alquiler

La modificación de un contrato de alquiler es una práctica habitual que permite ajustar las condiciones de arrendamiento a las necesidades de arrendadores e inquilinos. En España, estos cambios suelen formalizarse mediante la incorporación de un anexo al contrato original, siempre que ambas partes estén de acuerdo y se cumplan los requisitos legales establecidos.

Analizamos en detalle los aspectos del contrato de alquiler que pueden modificarse y las claves para hacerlo correctamente.

Motivos para modificar un contrato de alquiler

Antes de realizar cualquier modificación en un contrato, es fundamental identificar los motivos que pueden justificar el cambio. Estas son algunas de las causas más frecuentes por las que se suele modificar un contrato de alquiler:

  • Cambio de titularidad del contrato
  • Actualización de datos personales del propietario o inquilino
  • Variación de la cuota de alquiler

¿Cómo se modifica un contrato de alquiler?

El modelo de contrato de alquiler puede variar según el tipo de inmueble. En España, los locales comerciales y viviendas están regulados por la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

Modificación mediante anexos

La opción más habitual para modificar un contrato de alquiler es a través de un anexo o adenda, un documento adicional que se adjunta al contrato original para introducir cambios sin necesidad de firmar un nuevo contrato. Este método ofrece flexibilidad y mantiene la seguridad jurídica de ambas partes.

Estas son las características principales del anexo:

  • Se redacta de cero, explicando claramente las modificaciones o nuevas cláusulas
  • Se requiere la firma de las dos partes, arrendador y arrendatario, como prueba del acuerdo mutuo
  • Mantener la validez del contrato original, garantizando seguridad jurídica para ambas partes

Este método permite actualizar las condiciones del arrendamiento de manera flexible y legal, asegurando que todas las modificaciones queden formalmente registradas durante la vigencia del contrato.

Requisitos legales y cláusulas modificables

Para que un anexo sea legalmente válido en España, debe cumplir con los siguientes requisitos:

  • Consentimiento mutuo: Tanto arrendador como inquilino deben estar de acuerdo con las modificaciones
  • Formalización por escrito: Los cambios deben quedar reflejados en un documento escrito y firmado por ambas partes
  • Contenido permitido: Los datos que pueden modificarse en un contrato de alquiler incluyen:
    • Cuota de alquiler
    • Inclusión o exclusión de inquilinos
    • Nuevas obligaciones para las partes
    • Datos de pago (plazos o formas de pago)
    • Datos personales de las partes
    • Gastos adicionales
    • Procedimientos en caso de impago
    • Destino de la propiedad (local comercial o vivienda)

No obstante, algunas cláusulas no pueden alterarse mediante anexos, especialmente lo recogido en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

Limitaciones y desacuerdos en la modificación

¿Qué ocurre si inquilino o propietario no están de acuerdo? Si el inquilino no está de acuerdo con el cambio, el propietario no podrá implementarlos hasta la finalización del contrato. Llegados a este punto, se podrá pactar un nuevo acuerdo de contrato de arrendamiento según lo dispuesto por la Ley de Arrendamientos Urbanos.

Cláusula de rescisión en contratos de alquiler: qué es y cómo se aplica

Si el propietario se opone a la modificación del contrato, esta no podrá llevarse a cabo. En estas situaciones, la cáusula de rescisión cobra especial importancia, ya que permite finalizar el contrato de forma anticipada, ya sea por incumplimiento de lo pactado o por causas justificadas recogidas en el contrato. 

Esta cláusula permite a cualquiera de las partes rescindir el contrato bajo ciertas condiciones, como un preaviso mínimo o una penalización pactada. En este caso, el inquilino tiene la opción de resolver el contrato tras haber transcurrido al menos seis meses desde su firma.

Una vez que el anexo al contrato original esté firmado por ambas partes, puede registrarse en el Registro de la Propiedad. Aunque este paso no es obligatorio, se recomienda hacerlo para mayor seguridad jurídica.

Subrogación del contrato de alquiler

La subrogación en un contrato de alquiler puede darse en casos como separación, divorcio o fallecimiento del inquilino. Según los artículos 15 y 16 de la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de Arrendamientos Urbanos esta subrogación puede realizarse automáticamente en ciertos supuestos, aunque es necesario notificar al arrendador dentro del plazo legal.

¿Cómo se realiza el anexo del contrato de arrendamiento?

Si fuera necesario realizar un anexo al contrato original, este debe incluir:

  • Nombre, apellidos, DNI y dirección de las partes involucradas
  • Referencia del contrato de alquiler original
  • Nueva cláusula, con fecha de firma y lugar
  • Firmas de arrendador y arrendatario

¿Se puede modificar el contrato de alquiler una vez firmado?

Sí, un contrato de arrendamiento puede modificarse después de su firma, siempre que exista mutuo acuerdo entre propietario e inquilino.

¿Se puede utilizar alguna herramienta tecnológica para gestionar modificaciones?

Sí, la tecnología puede simplificar la gestión online de contratos de alquiler con modificaciones. Existen diversas herramientas digitales que permiten:

  • Redacción y firma electrónica: Facilitan la creación y validación de anexos sin necesidad de desplazamientos físicos, se puede firmar el contrato digitalmente.
  • Almacenamiento seguro: Garantizan la conservación y acceso a los documentos modificados en cualquier momento, garantizando la integridad y disponibilidad.
  • Comunicación eficiente: Mejoran la interacción entre arrendador e inquilino, reduciendo tiempos de respuesta y evitando posibles malentendidos.

Otras preguntas sobre los contratos de alquiler

¿Es obligatoria la fianza en un contrato de alquiler?

En España, la fianza sí es obligatoria para los contratos de arrendamiento de vivienda. Según la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), el arrendador tiene derecho a exigir al arrendatario una fianza equivalente a una mensualidad de la renta en arrendamientos destinados a residencia habitual.

¿Cuándo se puede rescindir un contrato de alquiler?

El contrato de arrendamiento puede rescindirse por diferentes circunstancias, según lo estipulado en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). Algunas de las razones más comunes para rescindir un contrato son:

  • Finalización del periodo de arrendamiento
  • Mutuo acuerdo entre las partes
  • Incumplimiento contractual

Además, el arrendatario puede resolver el contrato anticipadamente si se dan ciertas condiciones, como un preaviso adecuado o en caso de situaciones excepcionales que lo justifiquen.

¿Cómo se determina la actualización anual de las rentas en los contratos de arrendamiento de vivienda? 

A partir de 2025, la actualización anual de las rentas en los contratos de arrendamiento de vivienda en España se realiza según el Índice de Referencia de Arrendamientos de Vivienda (IRAV), un índice establecido por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este índice tiene como objetivo evitar incrementos desproporcionados en las rentas, garantizando un ajuste más equilibrado y predecible.

El IRAV se calcula tomando el valor mínimo entre las siguientes tasas de variación anual:

  • Índice de Precios de Consumo (IPC)
  • IPC subyacente
  • Tasa de variación anual media ajustada del IPC y del IPC subyacente

Fuentes