La visión de Cushman & Wakefield impulsa todo lo que hacen, y sus valores guían su comportamiento en todas sus relaciones comerciales. Sus clientes, sus competencias principales y la capacidad de su personal para ofrecer esas competencias fundamentales constituyen su marca, y abordan los negocios con una disciplina, coherencia, sencillez y transparencia que son únicas y diferencian a C&W. La llegada de la nueva economía mundial cambió la forma en que las personas interactúan, alteró la dinámica empresarial y transformó el panorama inmobiliario. Cushman & Wakefield respondió alineando las geografías, los servicios, el talento y los procesos para ofrecer un valor significativo a sus clientes. En todo momento, se han mantenido fieles a su filosofía, que guía todo lo que hacen: sus clientes son lo primero. Los definen sus clientes y se esfuerzan por alinearse con las necesidades de sus clientes todos los días.